Lo importante no es conseguir una meta, sino transitar el camino que te lleva a ella, con atención y apertura de aprendizaje (Jave)

Cuando te enfocas a vivir desde el ego, cometes algunas inversiones que no te resultan nada productivas para encontrar la paz, la armonía, la felicidad. Lo hacemos todos. Con inversiones quiero decir que cambiamos el orden de prioridad de las cosas y nos engañamos buscando aquello que nos va a traer infelicidad en algunos casos, y en los mejores, felicidad para un momento y vacío posterior.

Una de estas inversiones que sueles hacer es poner el foco en conseguir metas. Tu objetivo es conseguir alguna meta. Y una vez fijada esa meta te pones en camino hacía ella. Si te enfocas en esa meta corres el riesgo de no prestar atención al camino, y no aprender nada durante ese camino. Flaco favor te estás haciendo.

En primer lugar, si no consigues la meta, todo el esfuerzo no habrá valido para nada. Será el momento del sufrimiento, de la frustración, … Pero si consigue la meta, no creas que te va a durar mucho ese momento de satisfacción y felicidad, no. Lejos de eso, al rato, buscarás otra meta que conseguir, y luego otra, y otra.

Esto no quiere decir que no debes tener metas y objetivos. Claro que si, por supuesto, pero eso no es lo importante, no es lo básico.

Pon en el foco en el camino que vas a realizar mientras luchas por esa meta, que es lo realmente te hará crecer. Mientras consigues o no tu meta, presta atención al camino y aprende todo lo que la vida te va a enseñar, que es mucho. Si así lo haces, el conseguir la meta o no, quedará a lo largo del camino en un segundo lugar, porque habrá merecido tanto la pena el camino y, sobre todo, el aprendizaje que has obtenido que tomarás consciencia de que eso es lo importante.