A lo largo de la vida no siempre has actuado a tu favor. Muchas veces tus actuaciones has venido originadas por los patrones que han generado una personalidad esclavizada a unos tipos de comportamientos que jugaban en contra de tu libertad, de tu paz, de tu crecimiento.
Conforme vas poniendo el foco en tu interior y te haces más capaz de observar desde donde nace su movimiento, desde donde nacen tus emociones, te das cuenta de todos eso patrones, de todos esos seres limitantes que tanto sufrimiento te producen. Y ahí se produce un cambio maravilloso. Empiezas a tomar las riendas de tu vida, y ésta pega un giro de 180º. Eso hace que vivas más intensamente, más pacíficamente, más conscientemente, más auténticamente. Empieza a aumentar tu consciencia.
Cuidado. No bajes la guardia de la atención. No dejes de mirar todo desde tu corazón. A poco que dejes de hacerlo, tus patrones, tus seres limitantes empezarán a asomar, intentarán volver a tomar las riendas de tu vida. Corres el riesgo de repetir tus experiencias pasadas. Lo cual no es ni bueno ni malo, simplemente es, y seguro que es por que lo necesitas. Pero si quieres evitarte pasar dos veces, o tres, por el mismo sitio, pon atención, pon en juego tu corazón, observa cuando aparece tu ego, y no le dejes tomar el mando. El poder está en ti, siempre.
