Cada acontecimiento puedes mirarlo desde una perspectiva constructiva o destructiva para ti misma, y eso definirá tu camino, tu eliges (Jave)

La espada tiene dos filos, igual que la vida. Cada acontecimiento que vives tiene dos filos, tienes dos maneras de entenderlo. Puedes hacerlo de manera constructiva o destructiva. ¿Constructiva o destructiva para quién? Para ti misma, solo para ti misma, siempre para ti misma.

Debes ser consciente de que cada experiencia que vives, cada error que cometes, cada resistencia que sientes la puedes vivir desde dos “lugares” totalmente distintos.

Puedes utilizar eso que te ha tocado vivir para crecer. Primero porque ese es el principal propósito de la situación vivida, tu crecimiento. Cada experiencia viene para que tu aumentes tu nivel de consciencia, para que puedas darte cuenta de algo que te tiene atada, agarrada, enganchada a tus programas y seres limitantes, y liberarte de ello. Segundo porque eso te hará mejorar y hacer que tu vida sea más coherente con lo que tu quieres que sea. Y tercero porque si no lo haces así, sacarás a jugar a tu parte más dolorosa. Esa parte que te agarra a tu ego, y que hace que cada vez te sientas más pequeña, menos valorada, menos capaz, y eso te lleva a una dinámica muy sufriente. Así utilizarás la experiencia vivida para hacerte daño. No la aprovechas para crecer, sino para hundirte más en el sufrimiento, en el victimismo, en el “no puedo”.

Y sí, tu puedes, no solamente puedes, además te lo mereces, así lo desea el que te creó a su imagen y semejanza, siempre libre, poderosa, luminosa y pacífica. Él no lleva cuentas, no las lleves tu. Siente que te mereces lo mejor. Siente que puedes mirar cada acontecimiento de tu vida, desde la perspectiva de mejorar. Utiliza todo para crecer. Tu eliges.