Esta máxima es siempre cierta. Cuando el otro me ataca o me trata mal, en realidad está pidiendo mi ayuda, aunque lo haga de forma inadecuada, pero es eso lo que necesita, mi ayuda. Le hace falta Amor, así sin más, porque si pongo el Amor en acción y ese otro deja que le vaya llegando, aunque sea a dosis muy pequeñas, una simple gotita de Amor iniciará el camino, y todo acabará bien.
Pero ahora es más importante. Ahora es crucial. Ahora es indispensable que caigamos en la cuenta de que hace falta Amor. Ahora es el momento.
Ya está bien de alimentar el miedo. Recibimos miedo por todos lados. Y tú puede elegir, no comprar ese miedo y dar amor. Es nuestro momento. Es el momento de devolver Amor por miedo.
Es ahora cuando debemos preocuparnos de que ese miedo no nos atrape. Es ahora cuando debemos actuar desde el Amor. Es ahora cuando debemos poner el Amor en acción en cada palabra, en cada gesto, en cada ocasión que podamos. Y la ocasión es siempre.
Si te lanzan miedo, tu lánzales Amor.
Si te hablan con miedo, tu háblales con Amor.
Si te quieren transmitir miedo, tu transmíteles Amor.
Vamos que el Amor todo lo puede, el Amor todo lo alumbra, el Amor es la fuerza más poderosa que existe. Pongámosla en juego, que así ganaremos, seguro.
